Los días festivos pueden traer muchas emociones mezcladas – sentimientos de nostalgia, ansiedad, depresión y a veces hasta terror – en las personas con duelo. Las imágenes de la unión familiar y esperanzas quizás poco realistas durante tiempos que se supone son de alegría y armonía perfecta pueden causar tremendo estrés para los que no están en duelo—permitirnos entonces imaginar cómo se sienten las personas que están pasando por una experiencia dolorosa, aislante como es el duelo. Crear nuevos rituales y nuevas tradiciones que honran a la memoria de la persona que murió es una manera para sobrellevar e incluso dar la bienvenida a los días festivos. Aquí están algunas sugerencias de lo que usted puede hacer:
Consideraciones especiales para padres de un niño o adolescente en duelo:
Asegúrese de incluir a su hijo en pláticas donde se tengan que tomar decisiones. Permítales que expresen sus opiniones sobre lo que ellos necesitan para poder disfrutar de los días festivos en ausencia de la persona que murió. Los preparativos y las celebraciones de los días festivos ofrecen distracción a los niños en duelo. Las reuniones de familiares y amigos reducen el aislamiento que sienten los niños en la escuela, o en otros grupos con compañeros que no están en duelo. Anímelos a que disfruten de las festividades sin sentir culpa, recordando que a la persona que murió le hubiese dado gusto que el niño disfrute a pesar de su duelo.
Una vez que usted ha recordado a la persona que murió, cuídese a usted mismo (tome tiempo y siéntase tranquilo). Tenga días festivos significativos.
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